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30/6/12

Hoy no

Esta noche los sueños no se cumplen,
se ha ido el sol encendiendo el último blues...
Se ha apagado mi voz
recordando de nuevo tu nombre
sin poder evitar llorar
al recordar cómo te bajabas del coche
mencionando aquel último adiós...

Nunca fue

El principe azul fue marrón y no quiso llamar,
ahora el espejo escupe la verdad...
¿Dónde están las noches sin pastillas
para poder dormir?
¿Dónde están las promesas
que aún me quedaban por cumplir?

Jodida realidad, abofetea mi cara
recordándome que tú ya no estás,
maldita esperanza, quise fiarme,
quise caminar con ella
y me soltó la mano al cruzar
dejándome en medio de la nada...

Maldigo la tarde en la que te conoci,
aquella en la que pensé que eras para mi,
maldigo haberme lanzado al vacío,
ahora ya no me atrevo ni a sonréir
maldigo no dejarte de esperar,
putas las ganas de quererte ir a buscar...

Lágrimas

Alguien roba mi sueño,
han hipotecado mi risa, 
han embargado mis ganas
de asomarme al mundo,
de asomarme a la ventana.
Algo enfría mi cama,
algo me trajo esos fantasmas
que me roban los colores,
alguien respira de mi esencia...
Tengo banca rota de ilusiones
y clavados ya cuatro alfileres.

Me quedan mis canciones,
mis imágenes, mis recuerdos,
mis calles y mis despedidas,
aquellas que mojan mi mirada,
esas que ahogan mi alma.

Alguien custodia mis historias,
alguien ha teñido mis días de gris,
algo mueve los hilos
para volver a empezar
a mezclar las penas 
con las copas que mi garganta vacía,
algo me dice que me pierda
y que me vaya con el son al alba
sin mencionar ninguna palabra,
sin recordar a mi almohada,
esa que por las noches
duerme conmigo empapada...

Me quedan mis canciones,
mis imágenes, mis recuerdos,
mis calles y mis despedidas,
aquellas que mojan mi mirada,
esas que ahogan mi alma.

Perdida

-¿Qué ha pasado?

-No eres tú...

-¿Es miedo?

-No... No quiero hacerte daño.


"Se rompió la barrera del sentimiento, se quedó vacía y sin mundo en un segundo, no supo decirle "te necesito", le dejó marchar a través del tiempo que él la había pedido, siguió su camino esperándole a través de sueños vacíos, quiso mentirse y odiarle, quiso superarse y olvidarle... El sentimiento sacó a relucir su armadura y no pudo luchar aún creyéndose ganadora de mil batallas que con anterioridad, ya fueron perdidas... Cayeron sus lágrimas en el silencio de la distancia, sabía que le nombraba mientras dormía, le lloraba en cada desvelo hasta ver la luz del día, se sentía derrotada, vencida...
Inclinó su copa vacía y brindó con la ausencia, se vió absurda como las horas que la traspasaban sin hacer nada, cerraba los ojos y recordaba sus labios sobre su cuello.
Negoció con la gasolina para no ver amanecer, soñaba con los imposibles del querer, sus ganas la abandonaron, su ilusión poco a poco se marchitó mientras no dejaba de recordar aquel adiós.
Jamás será princesa, Sabina nunca la cantó, sus besos fueron alquilados, sus frases se quedaron sin sitio en su espera, vio anochecer entre falsos sentimientos...
Ahora va sola, ahora no cree, no sabe si espera o si se derritió su tiempo con él."

Vacía

Te haré protagonista de verdad,
aprenderé a sonréir por ver tu foto
sin necesidad de volver a llorar...
Me preparé para vivir mi sueño,
aquel, que por primera vez 
creí que sería de verdad...
Hoy te transmito mis versos
sobre trozos rotos de papel,
papel que se vuela con mis suspiros,
que se transparenta con mis lágrimas,
que viaja a través de mis sueños
para poder rozar tus labios.

Y mi alma, vacía, 
hoy quiere llorar.


2º día

Primeras intenciones, segundo asalto,
tercer minuto, cuarta despedida,
quinto beso por el séptimo cielo...

Primer te quiero, octavo riesgo,
décimo desvelo, sexto pecado,
tercer verso por el quinto lamento...

A cuarta pared de tus labios,
al primer te extraño
por el segundo te olvido...

Al décimo cuarto segundo
estando en la quinta tentación
de ir a buscar el penúltimo instante...

A la centésima mirada,
al primer trago de la adicción
de tu primer acercamiento...

En el último minuto de la primera tarde,
a la novena despedida
por el último te espero.

¿Cómo...?

Dime...
Dime cómo te olvido si sólo recuerdo tus sonrisas,
si cada minuto que pasa añoro cada una de tus caricias,
si cada noche se me hace un poco más larga por estas ganas locas
de tenerte, de hablarte, de mirarte, de rozarte, de escucharte...

Dime...
Dime cómo no pensarte si tengo tus miradas clavadas en mis labios,
si aún guardo mis sonrisas y mil momentos que dedicarte,
si cada vez que salgo a la calle aumenta la tentación de ir a buscarte,
de volver a abrazarte, de que pase el tiempo y el miedo se calle...

¡Dime!
¡Dime cómo desprenderme de tu nombre
si lo llevo en silencio en mis latidos!
¡Si mis intentos de versos es la desesperación
que siento en esta soledad al recuperarte!

¡Dime!
¡Cómo olvidar que te marchaste si en mi cama aún te sueño,
si recuerdo el tacto de tu cuerpo, el sonido de tu risa,
mis ganas, tus manos, tus guiños, tus sonrisas,
tus palabras, tu deseo...!


Delirios


Me pesa el tiempo sin saber de ti,
me duelen los minutos al pensarte...
Salté al vacío
sin llevar conrazón de repuesto,
he estrellado mi copa vacía
contra la pared de tus silencios,
no sé cómo llevarte
a mi rincón más secreto...
Te he perdido de vista
y ya te echo de menos,
me sobran los gramos que no son de tu cuerpo,
intenté volar sin motores
y amanecí en el suelo,
quise compartir contigo mis febreros
y ahora no tengo tu calor,
pero asún, no sé por qué coño tiemblo...
Anduve en la rama de la ilusión
pero ha dado la mano a tu sombra
y ambas se han marchado,
el vino me lo ofrece la soledad,
ahora es el momento 
de que me digas que no...
Tengo ya los ojos rojos
de vivir a través de los excesos
que la tristeza me va ofreciendo,
me regalé en otras intenciones
esperando recuperar mis maneras,
las mismas que tenía antes...
No he sido capaz,
no sé por qué quiero esperarte,
viví de lo absurdo durante dos días
recorriendo direcciones, teléfonos, lugares 
y sueños...
No me entiendo, me encierro,
te pienso, lloro, te recuerdo,
me desespero, te nombro,
no duermo, salgo, me pierdo,
escribo, canto, grito...
¡Silencio!
Mi corazón ha vuelto a perderse entre las sábanas
mientras cuando te marchabas
mis labios en silencio gritaban 
el que sería mi último 
te quiero.

Nuestro momento

Lo que daría por regalarte el mundo en cada palabra,
por dejarte respirar de la pasión
que provocas con tus besos,
de las ganas de sentir tus caricias en mi cuerpo...
Lo que daría por parar el tiempo entre tus dedos
y dejar que la noche pase
bebiendo de las palabras de tus ojos.
Quién pudiera saciar la sed de mis versos,
si sólo deseo el tacto de tu espalda
para poder saborearlos...
Me encantaría beberme las calles a tu lado,
hacer que sea especial cada momento
mientras la complicidad se comparte en el silencio...
Quién pudiera susurrarte ''quiero un amanecer a tu lado''
si cuando añoro tu voz en mi colchón,
me doy cuenta de que te has marchado.
Hazme hueco esta noche entre tus sueños,
porque quiero desdibujar en ellos
cada curva de mi cuerpo,
hacerme cómplice del viento
y poder acariciar tu rostro
mientras el silencio...
En la complicidad, hace el resto.

La realidad

Harta de estar sola rodeada de tanta gente,
te espero hoy derrotada,
te llevo aún en mi mente...
Sé que no merezco vigilar tus sueños
pero es mi desvelo el que está custodiado
por el sonido de tu risa 
y el tacto de tus manos...
Esta noche he vuelto a subir al tejado
y veo la vida menos puta cuando estabas a mi lado,
fuistes un sueño,
yo tan sólo un destino barato...
La lluvia moja mi cara,
grito entre los coches cuando todos duermen,
quiero acostarme entre tus brazos,
pegar una patada al sol
y quedarme entre tus ojos,
aniquilar con un "stop" al reloj,
a ese mismo que sentenció en adiós...
Se me tuercen las mañanas
y tú, me escupías una sonrisa,
me abandonaba el sueño de madrugada
y no me devolvías la patada,
declaré la guerra al destino
arriesgando por un camino
y éste, me enseñó que no entiende de banderas...
Se me caen las estrellas por no brillar en la oscuridad,
ahora mis intentos de versos,
de nuevo la jodida realidad...

Deseos

Ójala tuviera billetes para la eternidad,
quisiera que mis palabras no fueran tan sólo eso...
Palabras.
Que se muera la ciudad y sus rincones,
mira que te dije que me esperes
y hoy...
Sólo me quedan mis canciones,
mis intentos de versos,
mi locura más atractiva,
mi última copa,
mis sueños...
Esos que paso en vela.

Y creo que me pierdo,
apuesto a piedra, tijera o papel
y de nuevo te pierdo...
Ójala escucharas mis silencios,
quisiera no llevar tu nombre en mis lágrimas
pero me pierdo entre los recuerdos...
Esos que alimentaban tus sonrisas,
y hoy...
Sólo me queda mi melodía,
mi almohada, 
mi amanecer a solas,
aquella despedida.



Aún

Aún siento tus caricias
en cada rincón de mi cuerpo,
aún escucho tu voz
en mis interminables silencios,
ójala pudieran llegarte mis versos
a través de los susurros de mis sueños.

Aún busco tu mirada entre la gente
pero no te encuentro,
respiré de mi último aliento
para así, darme cuenta
de que ya no te tengo,
para ser consciente
de que por ti espero...

Para seguir gritando en la distancia
que sé que te quiero.

Tengo

Tengo la voz ronca de quererte,
el alma vacía de nombrarte,
los suspiros apagados de esperarte.
Tengo las manos rotas de escribirte
y el tacto suave 
de en el cielo acariciarte,
tengo los ojos secos de soñarte
y la voz preciosa de cantarte.

Tengo las alas rotas
por tu poesía y la mía,
tengo llagas en los labios
del sabor de la despedida.
Echo de menos tu sonrisa, tu calor...
Fuiste mi acierto y mi error,
tú...
Eres el último respiro de mi voz.

última estación

En el último rincón,
allá donde la espera se hace eterna,
donde los segundos se derriten
sobre el tic-tac de mi tristeza,
en el escondite de tu ausencia,
es tu recuerdo el que baña mi almohada
con lágrimas de madera.

En el último eco
donde resuena mi voz, hoy dormida,
escucho de nuevo tu respiración
y pese a no tenerte a mi lado
las cuatro paredes de mi habitación
son las testigos de, que entre sueños,
de nuevo tehe mencionado.

Es el último tren a la melancolía,
pasé por la estación de la ilusión,
visité la ciudad de las ganas,
vi por la ventana los te quiero
y ahora saboreo la despedida.

Mi sueño...

El abandono se presenta,
la soledad se palpa...

Hoy tengo el alma rota de nombrarte,
las manos agrietadas por no poder tocarte,
la voz muda dd soñarte
y los ojos secos de no poder mirarte...

Mi sueño, mi ilusión...
Mi error.

Mi último respiro cuelga de tu recuerdo,
mi sentimiento recuerda tu pelo,
esta ausencia te nombra
sin yo tan siquiera quererlo...

Mi sueño, mi ilusión...
Mi error.

No tengo otro recuerdo que tus labios,
no hay más motivo que el de pensarte de noche
y buscarte de día...
Mis labios permanecen inertes..

Mi sueño, mi ilusión...
El sabor amargo de la despedida.

19/6/12

70 minutos de 60


Hoy, te vuelvo a mirar,
No, no me puedo controlar…
Te vuelvo a pensar,
No lo puedo evitar,
Me encanta imaginar
Que mis versos recorren tu espalda,
Que tus labios se deshacen de mi vestido,
Tus caricias calman mi miedo
Mientras el tic-tac del tiempo advierte
De que pese a la distancia,
Te llevo en mi mente…
Pretendo que surja ese momento,
No puedo evitar el sentimiento,
Tengo miedo pero no quiero perder esto,
Tú… Quién me lo diría,
Que a través de la nada,
Consigas regalarme mil sonrisas
"por los 70 minutos de cada 60"