Allí donde las horas no pasan,
aquí que el tiempo me mata,
allí, donde esperas una llamada
y yo aquí,
que no veo el momento
de que tu voz, sea escuchada.
La impotencia me consume,
a ti la rabia te marca,
allí donde eres libre a puerta cerrada,
aquí, queriendo regalarte mis alas,
quiero entregarte mil palabras,
compensar tus caricias,
tener un momento a solas...
Allí donde los sueños escapan por la ventana,
aquí... Donde la libertad no es valorada
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